La Universidad Autónoma de Santa Ana (UNASA) realizó la cumbre de datos local del proyecto “Casa Torogoz”, denominada: SEGUNDA GENERACIÓN, una iniciativa pionera que ha brindado oportunidades y ha fortalecido habilidades en mujeres jóvenes.
Casa Torogoz fortaleció las capacidades de las mujeres a través de diversos talleres como creación de contenido, Podcasting, Lengua de Señas Salvadoreña (LESSA), work skills, agentes de cambio y bootcamps, los cuales fueron impartidos por especialistas de cada área en el Museo de Anatomía Humana de UNASA.
Además, se les proporcionaron herramientas tecnológicas, como kits para crear contenido multimedia para el desarrollo de los talleres y proyectos propios.
“Las participantes han fortalecido sus habilidades, las cuales esperamos que sean de mucha ayuda en el proceso de la vida. Motivamos a las participantes a que multipliquen todos los conocimientos en su entorno para superar las diferentes crisis en el diario vivir”, destacó Máster Aracely Aguirre, jefa del Departamento de Proyección Social de UNASA y coordinadora del proyecto.
En la cumbre de datos local presentaron los resultados de la investigación para el cambio a través de un documental y una exposición de retratos titulado “Portraits of change”, (Retratos del cambio); productos de conocimiento que evidencian el fortalecimiento de las capacidades de cada una de las participantes. En total son 25 mujeres jóvenes residentes en los departamentos de Santa Ana y Ahuachapán.
“Desarrollar Casa Torogoz ha sido un camino muy enriquecedor en todos los sentidos. Como UNASA nos sentimos satisfechos de todo lo logrado por las participantes. Casa Torogoz vino a revolucionar la forma en la que se hace investigación, los detalles con los que se planifica un taller y su metodología. Todo esto sucede cuando se unen actores claves que desean crear un cambio en la sociedad y que quieren contribuir al empoderamiento de las mujeres en nuestro querido El Salvador”, enfatizó José M. Hernández, oficial de Relaciones Internacionales de UNASA y coordinador del proyecto.
El proyecto fue apoyado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y la organización sin fines de lucro IREX, bajo el programa Youth Excel.
El compromiso y la dedicación de todas las instituciones participantes han dejado una huella duradera en la vida de estas mujeres. UNASA espera continuar con la tercera generación de Casa Torogoz el próximo año.
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