El cuatro de febrero del 2024 quedará grabado como una fecha trascendental en la historia de El Salvador. El pasado domingo, se llevaron a cabo las elecciones presidenciales y legislativas, desencadenando una jornada repleta de acontecimientos significativos.

Desde las primeras luces del día, los ciudadanos salvadoreños se prepararon para ejercer su derecho al voto. Aunque los centros de votación tenían programado abrir sus puertas a las 7:00 a.m., muchos experimentaron retrasos de hasta 30 minutos o incluso una hora debido a la falta de preparación de las Juntas Receptoras de Votos (JRV).

Entre las razones aducidas para estos contratiempos se mencionó que algunas JRV no habían completado su instalación y que ciertas personas designadas para formar parte de ellas fueron denegadas en su acceso por carecer de la acreditación correspondiente.

Según Mario Peñate, capacitador del Tribunal Supremo Electoral (TSE), esta situación se originó por un desfase entre el número previsto de personas a capacitar (80,000) y el número real (120,000), lo que generó retrasos en la emisión de las credenciales necesarias para las JRV,”, informó.

No obstante, el día anterior a las elecciones, entre las 6:00 p.m. y las 7:00 p.m., el TSE había habilitado un enlace para que los votantes pudieran generar un documento que les permitiera ingresar a los centros de votación y participar en las JRV sin la necesidad de contar con la acreditación previa.

Este incidente fue solo uno de los varios que suscitaron disturbios durante la mañana electoral. Sin embargo, una vez superada esta fase inicial, el proceso de votación transcurrió con rapidez y eficiencia, según la opinión generalizada de los votantes, quienes afirmaron que el procedimiento completo, desde la entrada al centro de votación hasta la salida, no les llevó más de 15 minutos.

En un sondeo llevado a cabo por el Periódico Digital El Cénit se recogieron testimonios que destacaban la organización y agilidad del proceso de votación. No obstante, los problemas surgieron durante el escrutinio preliminar, ya que este año se había implementado el conteo de votos de forma electrónica. Cerca de las 10:00 p.m. del domingo 4 de febrero, el sistema del TSE encargado del escrutinio se colapsó, y los datos no pudieron actualizarse hasta el día siguiente, alrededor de las 5:30 a.m.

Este fallo técnico provocó inquietud en la población, como evidenció una encuesta realizada en el Facebook del Periódico Digital El Cenit, donde se consultó a los salvadoreños sobre: ¿Cómo calificaría el proceso para ejercer el sufragio en los centros de votación? A lo que un 25% otorgó una calificación de excelente, un 15% de bueno, un 5% de regular y un 55% de necesita mejorar.

Edgardo Ramos, lector el periódico manifestó que “Para las próximas elecciones deben de abrir los centros a la hora indicada, a las 7:00 a.m.”.

Tras el incidente con el sistema, el TSE decidió completar el conteo de votos de forma manual.

Escrito por Katya Rodezno.

Fotografía: Samanta Osorio.

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