La Bliblioteca Licenciado Carlos Alberto Saz de la Universidad Autónoma de Santa Ana (UNASA) ha iniciado la segunda fase del proyecto “Caminando con la Lectura”, con el objetivo de fortalecer los hábitos de lectura y escritura en niños de entre 10 y 12 años. Este proyecto, que se desarrolla en tres centros escolares cercanos a la universidad, busca transformar e impactar positivamente en las comunidades a través del fomento de estas habilidades.

“El año pasado desarrollamos la fase uno, que fue una intervención más directa en las escuelas El Portezuelo, El Edén y San Mauricio. Nuestro objetivo es transformar nuestro entorno e incidir en las comunidades”, explicó el Ingeniero Gustavo Linares, Administrador Académico de UNASA. Añadió que esta iniciativa forma parte de un macroproyecto denominado: “Comunidades de Práctica”, en el que trabajan directamente con los niños mediante talleres y actividades grupales e individuales.

El enfoque principal de este esfuerzo es el desarrollo de habilidades blandas y el pensamiento crítico en los niños. “Queremos dejar esa semillita en los niños para que les sirva, no solo como personas, sino también en su formación como futuros profesionales”, añadió.

La lectura fomenta el razonamiento lógico, el sentido común y la inteligencia emocional, herramientas fundamentales para su desarrollo integral.

Este año, el proyecto se enfoca en el seguimiento y acompañamiento a las escuelas para que puedan concretar actividades relacionadas con la creación de clubes de lectura y escritura. “Específicamente, queremos que los niños formen estos clubes en sus escuelas. Hemos dado acompañamientos porque ya están trabajando en eso”, explicó.

Como parte de las actividades de esta segunda fase, el equipo organizó un bootcamp en el que participaron niños seleccionados por su destacada participación en las actividades del año anterior. “Hemos seleccionado a cinco niños de cada escuela, los más productivos, aquellos que más se interesan por la lectura. Los profesores nos ayudaron a seleccionarlos, y hoy los tenemos aquí para motivarlos aún más”, expresó. La jornada incluyó actividades grupales, charlas y talleres, además de la participación del grupo teatral de la universidad.

El impacto de este tipo de iniciativas va más allá de las aulas, llegando incluso a las familias. “Queremos que los niños no solo se motiven a seguir leyendo y escribiendo, sino que también lleven ese entusiasmo a sus familias. Buscamos generar un mayor impacto”, subrayó el Ingeniero Linares.

El apoyo de los profesores también ha sido clave para el éxito del proyecto, Edgar Roberto Méndez, maestro de lenguaje y literatura en el Centro Escolar Colonia El Edén, comentó sobre el impacto del proyecto en su escuela, “Ha dado frutos, por ejemplo, tenemos una maestra encargada de la biblioteca que ha formado grupos de alumnos responsables de prestar libros a los niños. Los maestros visitamos la biblioteca semanalmente para que los estudiantes lean y luego reflexionamos en clase sobre lo leído”. También resaltó la importancia de dar seguimiento a este tipo de iniciativas: “Es bueno que un proyecto tenga seguimiento y no se deje olvidado”.

Con este tipo de iniciativas, UNASA sigue comprometida con el desarrollo cultural y educativo de las comunidades aledañas, dejando una huella en la formación de las formación de las futuras generaciones.

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